El cielo de los platos

Desde que regresamos de Europa mi abuela insistía en comprarse una vajilla cuadrada... Así que tras varias expediciones al centro, mi mamá decidió llevarla a que escogiera personalmente su vajilla. Visitamos muchas casas de platos en las calles de Artículo 123 y López... pero mi abuela no terminaba de escoger ninguna...
Incluso encontró unos platos navideños (en Junio, sí, es muy bonita época para los platos navideños) que terminarán empolvandose 364 días al año... Nos repartimos los platos entre mi hermana, mi mamá y yo, para llevarlos sanos y salvos hasta la casa...
Pero mi determinada abuela decidió que París bien valía una misa... así que nos trepamos a un taxi y llegamos a un conocido establecimiento de tiendas departamentales donde subimos seis pisos (¡Seis!) para llegar a la sección de hogar...
Tras deambular por entre docenas de artículos (las más de ellos sólo servían para coleccionar polvo, como adornitos de cristal, flores de plástico y esculturas de porcelana...) mi abuela encontró "La vajilla perfecta" (una que ya habíamos visto más barata, en otras tiendas) pero claro, en este almacén estaba "de rebaja" y además se la entregaban a domicilio, cosa que me pareció muy bien, porque yo estaba cargando siete platos y ya estaba bastante cansada.
Así que mi abuela sacó su todo poderosa tarjeta... que no pasó los designios del dios de la banca.
Ya estabamos todos muy tristes, pensando en que la excursión al cielo de los platos había sido infructuosa cuando...
¡Oh, recordé que yo traía también mi tarjeta de la cuenta de ahorros! Bueno, ahora soy la feliz propietaria de una vajilla de platos cuadrados con flores de tulipanes...
Está bien chula de bonita, pero se la van a ir a entregar a mi abuela y ella me dice que en cuanto pueda me la pagará.
La verdad nunca había comprado algo tan caro. Me siento un poco extraña, pensar que tantos días de corregir trabajos de los alumnos o soportar regaños de mi ex jefa del periódico va a terminar en... una vajilla.
Es algo que no se me hubiera ocurrido nunca. Pero bueno...
Nadie sabe para quien trabaja.
D.

2 comentarios:

NM dijo...

en mi compu no puedo comentar :(

por eso es malo abrir la boca jaja yo ya aprendí a no decirle a mi papa 'yo traigo, luego me los pagas' por que se que ese dinero no regresara jejeje saludines may may

Darina Silver dijo...

Ah, nata...

Yo espero que ese dinero si regrese algun día a mí... Generalmente el dinero regresa a mí, pero es un proceso lento.

Ojalá pronto tomes una decisión respecto a tu lugar de residencia... Sé que esto te está inquietando en este momento, pero verás que tu decisión final será la adecuada.

D.

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