La pluma Parker

- ¿Que será mejor?, ¿esperar o que te esperen?
- Ya lo descubrirás.

Le dije.

Y allí estaba, esperándome. Yo lo esperé muchas veces, antes.

Mi mamá me dijo que fuera a devolverle su pluma Parker. Finalmente él me la regaló.

- De regalo de graduación. - Me dijo.

Tuvimos un buen día, comimos tortas. A veces pienso que las tortas son el destino de todas mis relaciones, porque nunca me alcanza para invitar algo más estiloso, que vaya más allá de los sandwiches y las tortas.

Una vez disparé tacos.

Platicamos muchas cosas, me dijo lo que había cambiado.

Él me colmó de regalos, le envio dulces a mi mamá y nos despedimos.

De regreso a casa llovía y me pareció muy apropiado.

D.

8 comentarios:

Pinche Vieja dijo...

Se me antojó una torta u_u

Indigente Iletrado dijo...

Se me antojó esa arrachera que comí en Puebla.

D dijo...

Las tortas son la neta. Aunque mi mama diga que es puro 'pinshi' pan.

Yareli dijo...

Hmm...me gustan los reencuentros, tienen sabores interesantes

Darina Silver dijo...

Aquella pinche vieja:

Jo, creo que pondré un puesto, esto de las tortas fue un éxito.

Indigente:

También habrá torta de arrachera.

David:

Tu mamá es sabia, pero el hambre es más sabia aún.

Yareli:

Si, especiados.

D.

Juan dijo...

what are the chances?? leia esto mientras engullia una torta!!! jajaa

y los reencuentros, no he tenidmo muchos pero son tensos, o al menso yo los siento asi, jo

Darina Silver dijo...

Oralé... que curiosa coincidencia, amigo mío...

D.

Espaciolandesa dijo...

Ps...

Al menos tienes para invitar tortas.

¿Y...?

¿Le regresaste la pluma?

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