Justo como al principio

En todas las relaciones, justo al principio, hay un momento en que los dedos se tocan por primera vez, donde las complicidades se establecen, donde el juego de palabras cede al juego de manos y todo es felicidad...

Donde uno va caminando pensando en que el amor es eterno, que las promesas son para siempre, que las palabras que él o ella te dicen son la verdad decantada, que podrías compartir cada mordisco de sus papas fritas con salsa ketchup o que, si le gusta la mostaza Dijon, comprarías la más cara, importada de Francia, para que le ponga a gusto a su hamburguesa...

Claro, después todo se va corrompiendo con la patina del tiempo, el roce de la cotidianeidad, los pequeños y grandes malentendidos, los celos y en resumidas cuentas, como diría Sabina... "la mierda que arrastramos sin remedio".

Pero no puede uno dejar de idealizar esos momentos en que una papa frita deja de ser una papa frita... en que una casa se convierte en una casa de Seguridad... en que una manzana se convierte en "La manzana prohibida"... en que una tarjeta telefónica sugiere un beso... en que la vidriera de una zapatería es un refugio para los amantes... en que el lazo de un vestido se desanuda y queda un hombro descubierto... en que el té de frambuesa moja un montón de poemas y la tinta se corre... en que un esquema de una teoría física se tranforma en un mapa para subir a una torre...

Y uno quisiera que todo se conservara justo como al principio, más cuando el tiempo va disolviendolo todo, cuando hechas a perder las cosas y le dices a alguien verdades que duelen y mentiras piadosas...

Los carteles de Toros se caen de las paredes y quedan iniciales grabadas en una cárcel.

Uno quisiera evitar la entropía: las manzanas se pudren, las tarjetas se rompen, los cristales de las vidrerías se estrellan, los papeles mojados se tiran, los mapas quedan perdidos en la memoria y las paredes de las casas de Seguridad son pintadas de negro.

Comes una papa frita y tiene un regusto amargo: quizá estuvo demasiado tiempo en el fuego. No lo sabes... pero quisieras que todo fuera como al principio, donde la promesa era lo que te hacía levantarte de la cama.

D.

12 comentarios:

letrofilico dijo...

En las mañanas siguientes a las noches en que la luna junta a algunos... solo yacen flores marchitas, botellas vacías y esa resaca inteminable de los tiempos que fueron... un saludo

Mar dijo...

Enamorarse es bien chido.

Pero no creo que sea preferible a la sólida realidad que es el amor de 'a devis'.

Las papas fritas se enfrían, las imágenes de los hombros desnudos se memorizan y dejan de resultar sorprendes cada que se les descubre, las manzanas se vuelven lícitas y pierden su encanto...

Y entonces, mucha gente se aburre y se va. La gente afecta a la gloriosa sensación del enamoramiento, sobretodo, es la que huye cuando ésta concluye.

Por eso creo que el amor es mejor. Aunque los besos no sepan tan ricos como cuando uno está enamorado.

Mar dijo...

¡Ay, me tardé mucho escribiendo!
¡La gloria del comment número uno era mía!

Yareli dijo...

Ay, me dolió bonito!

Narcisa dijo...

Darina, tu post me ha conmovido. Me di una vuelta por las sombras de mi pasado y me disgusto saber que sólo hay rencor. Aunque "para decir condios nos sobran los motivos".

Ahora oigo a Cerati y me doy palmaditas en mi rodilla:
No te confundas, no sirve el rencor, son espasmos después del adios. Quedabas esperando ecos que no volveran... poder decir adiós es crecer...

Sólo que sea para los lados, litros y litros de helado me hacen pensar que sí, logré olvidarlo... (ajá, see). Saludos.

BRAINWASHED dijo...

Qué linda entrada!!

Enamorarme ha sido una de las cosas más extremistas que me ha pasado (y yo creo que a muchos), puedes tocar las alas de los ángeles ó besar la cola del diablo de un momento a otro y sin darse cuenta, a veces lo mejor sería recordar aquellos simples pero inolvidables momentos...aunque no es nada, nada fácil...en fin!!

Un saludo y excelente mitad de semana!

Nemheim dijo...

AL principio todos juramos no caer en esa cotidaneidad... pero con el paso de los años pareciera que la costumbre y la falta de seguir ingeniando, sorprendiendo pudieran terminar por levarse todo..
Bsox

Pável dijo...

Ay otra sarta de mentiras, qué curioso es el mundo bloguero.

Saludos, terrícola.

Darina Silver dijo...

Letrofilico:

"Y la vida siguió, como siguen las cosas que no tienen mucho sentido..."

Gracias por pasarte por acá.

Mar:

Ah, quien sabe, no me ha pasado.

Ja.

Yare: Lamento que te duela. Al menos es bonito.

Narcisa:

Sólo hay algo que me gusta más que enamorarme... y es el helado.

Brainwashed:

Me gustó tu imagen de ángeles y demonios...

Pues si, son cosas que se tocan al enamorarnos.

Vivienne:

"Malditos sean los enamorados que, al principio de su amor, no piensan que eso será eterno"

Pavel:

No niego mi condición de mitomana, eres bien recibido pesé a que tiene poco que renombré el blog.

Saludos a todos!

D.

John Bauer dijo...

Leyendo esto desúes de tu entrada de la fe, creo que también los padres deberían enseñarnos estas cosas, y no creo que sea como decirnos quiénes son los Reyes Magos, no creo que deban dejarnos vivir con la ilusión literaria peliculesca de que el amor es un camino de nubes y pétalos de rosas cuando la verdad es que muy pocas veces o ninguna la realidad es así....

Pero bueno, también para eso vivimos

Saludos
J

John Bauer dijo...

jeje,curioso, escribí eso minetras sonaba de fondo Oasis con Let There Be Love

Darina Silver dijo...

John Bauer:

Ayer vi una pelí llamada "Conversaciones con Dios" en donde el autor afirmaba que dios nos habla de tantas formas... a veces creo que enamorarse es una de ellas.

Un abrazo, John.

D.

Una mujer que caminaba sobre las vías

Se llevó a cabo la fiesta de fin de año de la oficina en la calle de Ferrocarril de Cuernavaca. La verdad yo no ubicaba mucho el rumbo, pero...